Ese oscuro objeto del deseo.

Si ya has leído mi post anterior sobre FON, comprenderás mi preocupación a cerca de la injerencia de la Empresa privada en las comunidades wifi, hoy, leyendo el blog de Martin Varsavsky en inglés, concretamente un artículo titulado "Bathrooms, Condoms, Money and Congregations", diserta sobre lo que mueve la cultura americana y a la europea, de cómo temas como el dinero están no son tan determinantes en Europa mientras en Estados Unidos son un referente.

El caso es que se desprende una de las estrategias del FON con respecto al al método de expansión, y es la que en su día comentamos, la apropiación de las cualidades de una Comunidad Wifi para la transmisión de los datos. Tal como indica en su bitácora, INTERFON será un referente para la transmisión de datos entre comunidades, de forma que, como el pone de ejemplo, puedas descargar datos sin tener que pasar por internet, simplemente consumiendo recuros de FON, o mejor dicho, de personas que prestan sus recursos para la red FON. Préstamo que puede ser por interés monetario (Bills, como indica en el caso de los Estados Unidos), o altruista (Linus, en el caso de los Europeos).

Está claro que cada vez más la idea de FON es la de una macro-comunidad Wifi, ya que sin los recursos de estas sería del todo imposible llevar a cabo la INTRAFON, y basándose sólo en usuarios, con los routers dentro de casa, sería de una pésima cobertura, por no decir testimonial.

Si desde un principio tenemos la idea de que Martin está en esto para ganar dinero, aunque luego diga que si puede, ayudará a la comunidad wifi, no debemos olvidar que por encima de todo está para generar un modelo de negocio lo bastante atractivo como para atraer al inversor mayoritario que sea el que realmente muerda el anzuelo.

Hasta ahora sólo he visto movimientos cara a la galería, la contratación de expertos, (Brainslayer) o de antiguos socios (Antonio Saez), muchos viajes a la sede de Google y demás, pero cero en inversión, apenas un par de routers, cedidos con la condición que se pongan como puntos FON, pero nada más.

Hay que recordar que, por ejemplo, el despliegue de la telefonía móvil costó miles de millones de euros y aquí se pretende dar una cobertura igual o superior simplemente mediante voluntarios. No nos olvidemos de que en el punto de mira de Martin está el killer-gadget que es el teléfono Wifi, que permitirá conectarse via Skype a través de la red FON.