El domingo fue la inaguración de parque de La Colina, en Olivar de Quinto, y decidimos pasarnos por la tarde. Pos amigos fueron a comer al Venecia y después de un helado no acercamos al parque sobre las 18:00, hora en la que estaban recogiendo las atracciones, por lo que sólo se pudieron subir escasos cinco minutos en el Titanic. Allí me encontré con varios conocidos que aprovecharon el buen día, muchos amigos del colegio de mi hijo tanbién se dio cita gran parte de Montequinto.
El parque está muy bien, lástima que casi no haya sombra, pero tiene fuentes y una zona acotada para que los perros puedan jugar sueltos. También está vallada la zona de juego de los niños, por lo que, en caso de despiste, es más fácil encontrarlo.
Lo peor de todo es la escalera de subida, por algo se llama el parque de La Colina, si deseas hacer ejercicio es un buen sitio para correr, aunque sólo te recomendaría el uso de patines si estás versado en el tema.
Al otro lado del mostrador
Pedro Carrillo
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